Cuanto más aprendo sobre la energía nuclear, más me convenzo de que la postura tradicional de los Verdes contra ella, bienintencionada y establecida desde hace tiempo, es profundamente errónea y contraproducente. En la emergencia climática global a la que se enfrenta el mundo, las energías renovables y la nuclear deben verse como socios que trabajan juntos para hacer frente a la crisis. No podemos permitir que lo perfecto se convierta en enemigo de lo bueno cuando nuestra casa está en llamas: el tiempo apremia y la energía nuclear nos ofrece una salida a nuestra dependencia de los combustibles fósiles.
Francis Moore, Londres
